Descripción
Algunos síntomas que podrían indicar que el sensor de cigüeñal necesita ser revisado o cambiado son problemas de arranque, rendimiento irregular del motor, con tirones, sacudidas o una pérdida de potencia durante la aceleración, paradas repentinas del motor, en algunos casos, un sensor de cigüeñal defectuoso puede hacer que el motor se detenga de repente mientras conduces, especialmente a velocidades bajas o al ralentí, problemas de ralentí inestable, si el ralentí del motor es inestable, fluctúa o se mantiene demasiado alto o bajo, podría indicar un problema con el sensor, pérdida de velocidad crucero, algunos vehículos pueden tener dificultades para mantener una velocidad constante.
Luces indicadoras en el tablero, como la luz de “Check Engine” (Revisar motor) o una luz específica de sensor de cigüeñal.
Si experimentas alguno de estos síntomas, es importante que lleves tu vehículo a un mecánico de confianza para que realice una inspección y determine si es necesario reemplazar.
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